lunes, 22 de agosto de 2022

UNA MIRADA A UNA LITOGRAFÍA, EL COMER Y EL BEBER

 

Dedico este escrito a mí nieta Andrea

 

UNA MIRADA A UNA LITOGRAFÍA

 

En mi dormitorio de Begur, en la pared que da a los pies de mi cama  tengo colgada una litografía,  la cual hace unas noches una vez más, fue la protagonista de mi mirada, pero esta vez  me apeteció  hacerla más reflexiva desde que la compré hace ya muchos años.

 

Primero, os la voy a presentar  y describiros los detalles de esta litografía.

  


 La figura principal  del grupo es el camarero Monsieur Henry, según he sabido en una  posterior investigación a través de Google de las obras del autor, y es portador de una botella cuya bebida queda identificada por la etiqueta donde figura la palabra  PASTIS,  la bebida anisada francesa por excelencia,  y que precisamente en la región de La Provence (La Provenza) es donde hay un mayor consumo, y que coincide con el nombre del café/bar.  Monsieur Henry nos mira a nosotros como los dos gatos y el perro, dándonos  el protagonismo de la obra, a nosotros el espectador; nosotros somos y seremos los apreciados clientes para Henry,  y los amigos para los perros y para los gatos.

 

La pareja de hombres del lateral izquierdo,  están bebiendo el refresco alcohólico que he mencionado antes, pero esta vez la jarra pone el nombre de  la marca, en letras mayúsculas se lee RICARD.

 

Quizás por este detalle, pasando por una tienda de litografías de Barcelona que exhibía ésta en su escaparate, mi inconsciente  hizo que fuera tan atractiva además de su conjunto,  para impulsarme a entrar para comprarla,  y además encargar su correspondiente marco. Digo esto, porque la compañía RICARD estaba ubicada en el  mismo edificio donde yo trabajé muchos años en una empresa de confección de moda  de caballero y señora, en el edificio emblemático de la Diagonal de Barcelona,  cerca de la plaza Francesc Macià, donde hoy está ubicada LA VANGUARDIA.

 

Aquella noche me propuse a investigar   a la mañana siguiente,  sobre  el autor de la obra Guy Buffet,  desconocido por mi totalmente.  ¿Quién fue? o ¿Quién era Guy Buffet?

 

 

 

Guy Buffet

 

Nació en París en el distrito de Montparnasse el 13 de enero de 1943, cuando su padre ya contaba con 65 años.

 

Su afición por la pintura empezó a la temprana edad de los 12 años, precisamente cuando su padre falleció.

 

Cuando tenía 14 años  se  mudó al sur de Francia con su madre, a un pequeño y hermoso puerto pesquero llamado "Sanary", no lejos de St. Tropez. Dejó la escuela para inscribirse  en la Escuela de Bellas Artes de Toulon para estudiar arte, y  así, describe  la influencia que tuvieron sus profesores en su estilo de pintar de la forma siguiente:

 

"Me encantó esa escuela bajo el sol brillante de Provenza. La mayoría de los maestros eran artistas profesionales de la Escuela de Provenza, con paletas de colores vivos y lienzos que eran pura alegría y amor a la vida, o como decimos en francés; ¡la alegría de vivir! Esto fue inmediatamente contagioso y dejaría una marca en mi estilo de pintura  hasta el día de hoy".

 

A pesar que su madre apoyaba los estudios artísticos de su hijo, le comentó que era difícil mantener aquella vida al sur de Francia con los pocos ingresos que percibía,  a lo que Guy le respondió que le apoyaría trabajando en restaurantes los fines de semana y las vacaciones escolares. En su trabajo descubrió el mundo de los chefs, los camareros y demás personal a fin al ramo,  que se convirtieron en sus señas de identidad para su carrera artística, tal como veremos en la pequeña muestra que os presentaré a continuación.

 

 

Monsieur Henry

 

Es el nombre que Guy Buffet denomina el cuadro que os muestro a continuación. Es un personaje  reiterativo en las obras de Guy, es el recordatorio de sus jefes y  chefs de los restaurantes donde trabajó en su juventud para ayudar a su madre.

 

 

 

EL COMER

 

Antes de iniciar mis reflexiones sobre la gastronomía, quiero destacar que comemos como mínimo tres veces al día, en contraste con tiempos pasados que   fueron cinco. Supongamos que nos reunimos varios amigos y cuando alguno de ellos tiene hambre seguro que acaba en disputa. Es tan importante para nosotros la comida que incluso la paz estuvo (y estará) amenazada por ella, recordemos,  por ejemplo,  la revolución francesa y la revolución rusa. Incluso hoy día tenemos un incidente  reciente de los emigrantes africanos queriendo saltar la valla de Melilla  para entrar en Europa. Incluso muchas  batallas se han perdido por un mal avituallamiento  de las tropas.

 

La humanidad está dividida en tres grupos de gastrónomos que tienen una estrecha relación con la comida y su temperamento. Todos los animales herbíveros son pacíficos de carácter: la oveja, el caballo, la vaca, la golondrina, el elefante, etcétera; todos los animales carnívoros son peleadores: el lobo, el león, el tigre, el halcón. etc. Esto ocurre por línea general con la humanidad, es obvio que me he dejado el tercer grupo, el grupo mixto, es decir los que comen  carne y vegetales, son los que realizan una dieta equilibrada.

 

Nuestra ascendencia era carnívora e incluso practicaban el canibalismo. ¿Nos hemos de extrañar, pues, que todavía nos comamos de forma metafórica, los  unos a los otros, con las guerras, y en nuestras relaciones sociales y políticas?

Mi apoyo a los veganos y en particular a mi nieta Andrea por abogar a  un mundo  más pacífico, y por apoyar la exclusión de la explotación y crueldad hacia los animales, a pesar de que yo me incluya en el grupo mixto.


Recuerdo, que  cuando yo era niño, los olores de los postres que elaboraba con todo cariño mi abuela Isabel: el  olor de la leche frita,  y de la canela en polvo de sus torrijas, el olor del limón, de la  canela en rama y en polvo de su arroz con leche, el olor del Anís del Mono de sus buñuelos de viento. Al final de la elaboración de los  postres,  los transportaba de su piso al nuestro a través del rellano de la escalera, y los vecinos se embriagaban del olor del limón, del anís y de la canela.

 

EL BEBER

 

De nuevo encontramos a la humanidad dividida en tres apetencias, los abstemios, como Nietzsche que incluso aborrecía la cerveza, o por el contrario los que beben en exceso, como lo hacía Sartre, que se columpian al filo del abismo de la salud, y los que bebemos de forma moderada, como hacía Kant.

 

En el año 1937, el año en que yo nací, se publicó en Harper's un artículo titulado "Los dictadores no beben", escrito  magistralmente por Charles W. Ferguson, que afirmaba que: Stalin, Hitler y Mussolini eran modelos de sobriedad. Y acababa el artículo diciendo:

 

"Ningún hombre podría ser dictador peligroso si le quedara el efecto matinal de una borrachera. Quedaría destruida su sensación de ser Dios Todopoderoso"

 

Recuerdo la afición a la bebida de Boris  Yeltsin,  que fue el artífice del inicio de la  transformación de la economía comunista de Rusia en una economía de libre mercado. Y sin ir tan lejos parece ser que no les iba tan mal al  Reino Unido con Boris Johnson con sus reiteradas fiestas en Downing Street, pero como los ingleses  son muy raros lo han hecho dimitir.

 

Para finalizar este apartado los camareros de Guy Buffet nos ofrecen  una copa de champagne

 

 


Comer y beber

 

El comer como el beber siempre es mejor hacerlo en compañía, es la celebración de un acto social, ya lo dijo el filósofo griego  Epicuro, siglos antes de Cristo:

 

"Debemos buscar a alguien  con quien comer y beber antes de preocuparnos de por qué comer y beber, ya que comer solo es llevar la vida de un león o de un lobo"

 

Un referente en mis escritos, Walter Benjamín, dijo:

 

"Comer solo vuelve fácilmente hosca y dura a la gente […]. Pues solo en comunidad se hace justicia a la comida, que para que siente bien exige ser compartida y repartida"

 

El artista, protagonista de hoy nos ofrece una muestra de la socialización, bajo la atenta mirada de Monsieur Henry, además, con un acompañamiento musical,  convirtiendo el cuadro en una velada  celestial.

 


 

Despedida

 

Tus litografías querido Guy, me  han transmitido  tu mensaje: "la alegría de vivir", y cuando coma y beba en compañía, los sabores, y las fragancias  serán el recuerdo de aquellos postres que elaboraba  mi abuela Isabel, pero los colores de los platos  y de las bebidas,  desde hoy,  me acordaré de ti.

 

 

 

Notas:

 

1ª El restaurante más antiguo de Catalunya y el segundo más antiguo de España (el primero es Casa Botín  de Madrid fundado en 1725) es Can Culleretes fundado en 1786,  y está situado en número 5 de la calle Quintana, en el barrio Gótico de Barcelona. Recuerdo con cariño las cenas en este establecimiento  con los miembros de la Coral dels Enginyers de Barcelona, en compañía  de sus familiares.

 

2ª Mi bebida preferida es el RAF, que son  las siglas de la Royal Air Force británica porque los pilotos al aterrizar de los combates en la II Guerra Mundial acostumbraban a beber esta bebida. Sus ingredientes son hielo, ginebra, rodaja de limón y Coca Cola.

 

3ª El 1º de noviembre se celebra el DIA MUNDIAL DEL VEGANO, desde 1994. El país con más veganos es el Reino Unido.