"La Felicidad Bruta
es mucho más importante que el Producto Interior Bruto"
Frase del rey de Bután
Jigme Singye Wangchuck en su discurso de su coronación (02-06-1974)
Preámbulo: la ética política
En este siglo
XXI y en el lugar en donde vivimos, sería
deseable que todos los políticos fuesen éticos
en su proceder para hacer felices a los ciudadanos. Es interesante
conocer que uno de los libros más leídos por todos aquellos interesados en la
política es “El Príncipe” de Nicolás
Maquiavelo. Este filósofo político italiano del siglo XV, ha dejado huella
con este libro vigente hasta nuestro tiempo. Una pregunta interesante planteada
en su libro es: ¿Qué es mejor, ser amado
o temido?
El líder político que desempeña
su actividad para acaparar poder, para enriquecerse o para fines egoístas no
puede servir a la comunidad.
El discurso
del rey
En este
siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, muchos ciudadanos nos sentimos
infelices porque el discurso de Felipe VI del pasado 3 de
octubre no empatizó con los ciudadanos que resultaron heridos durante la
votación del 1 de octubre.
Reiteró toda carencia de sensibilidad, en su discurso
en el acto de los Premios Príncipe de
Asturias del pasado 20 de octubre, con el bochorno de dar el Premio de la
Concordia a la Unión Europea en el momento histórico que estamos pasando.
El
tiempo despilfarrado
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, ha habido una reiterada posición de nuestros políticos
de ganar tiempo al tiempo ante un cruce de amenazas el gobierno central y la
Generalitat, contribuyendo los unos y los otros a la infelicidad de sus ciudadanos.
Esta
situación me ha hecho recordar una novela que leí en mi juventud: Los viajes de Gulliver, de Jonathan
Swift que relata una sátira sobre la naturaleza humana, donde los liliputienses viendo al protagonista consultar tanto el
reloj llegaron a la conclusión de que
sería Dios, ya que poseía el control del tiempo.
Afortunadamente
para nosotros, ni Dios es Puigdemont, ni Rajoy, y ambos no se han dado cuenta que el
reloj es un medio, y no tienen derecho hacernos
infelices entorpeciendo nuestra vivencia en el tiempo, como
ha sido durante este último mes de octubre,
y
suma y sigue, en los próximos meses.
El
síndrome de Tántalo
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, no han existido nunca tantas
oportunidades para poder ser felices. Pero los políticos, nos
han envuelto en el síndrome de Tántalo,
como en el mito, lo tenemos todo a nuestro
alcance y no podemos disfrutar,
en consecuencia más que vivir felizmente, mal vives.
La
desigualdad y los paraísos fiscales
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, buscamos la felicidad que no nos proporcionan
los políticos permitiendo que aumente la desigualdad y por la tolerancia con
los paraísos fiscales, no sólo los
que están alejados como en los de las Bermudas, las Islas Caimán, Singapur, sino
también los próximos en Europa como
Irlanda, Suiza, Luxemburgo, etcétera,
que gestionan patrimonios opacos de las familias más poderosas de España y
ofrecen un impuesto impositivo ridículo a las multinacionales. Todo ello en
perjuicio de su natural contribución en los impuestos para el Estado, haciendo que todo el peso recaiga para los
ciudadanos con menos recursos, contribuyendo cada vez más a que se agrande la
desigualdad.
La
marca España
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, he llegado a sentir vergüenza
ajena cuando veía las declaraciones de los ministros del Estado Español por
televisión que perdía sus colores y me recordaba el blanco y negro del NO-DO que veía en mi juventud.
El
boicot a los productos catalanes
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, los ciudadanos fuera de Catalunya no
saben que la mayoría de los productos catalanes, algunas de sus primeras
materias, componentes o intervenciones indirectas, son de empresas de su territorio, y con el boicot
lo que hacen es aumentar la crisis en Catalunya y en el resto de España.
Hace unos cincuenta años
cuando estudie un postgrado en ESADE, el profesor nos dijo: "el cierre de
cualquier empresa del mundo repercutía en nuestro bolsillo". En aquel momento,
tengo que reconocer que mis compañeros
de estudios y yo fuimos muy escépticos sobre su aseveración. En aquellos
momentos sin saberlo nosotros, nos había anunciado la globalización.
Diálogo
y concordia
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, pido a los políticos españoles y
a los galardonados con el Premio a la Concordia, que
tengamos PAZ, como dijo nuestro ilustre músico Pau Casals en su mensaje en la
ONU al serle otorgada la Medalla de la Paz, en el 24 de octubre de 1971 hace ya 46 años:
"La paz ha siempre mi mayor
preocupación. Ya en mi infancia aprendía a quererla. Mi madre, una mujer
excepcional, cuando yo era todavía un muchacho, me hablaba de la paz. Puesto
que en aquellos tiempos también habían muchas guerras.... Además soy Catalán. Catalunya
tuvo el primer Parlamento democrático mucho antes que Inglaterra. Y fue en mi
país donde hubieron las primeras naciones unidas. En aquel tiempo, siglo XI, se
reunieron en Toluges, hoy Francia, para hablar de la paz, porqué los catalanes
de aquel tiempo ya estaban en contra de la guerra. Hace muchos años que no toco
el violoncelo en público, pero he de hacerlo en esta ocasión. Voy a interpretar
una melodía del folklore catalán titulada "El cant dels ocells" (El
canto de los pájaros). Cuando elevan su vuelo al cielo, los pájaros van
cantando por el espacio, ¡PAZ!, ¡PAZ!, ¡PAZ! Y es una melodía que Beethoven,
Bach y todos los grandes hubieran querido y admirado. Y además nace del alma de
mi pueblo, ¡Catalunya!
Hemos
de seguir infelices o irnos a Bután
En
este siglo XXI y en el lugar en donde vivimos, buscamos la felicidad que no nos
proporcionan los políticos, estamos aún bajo el pensamiento de Albert
Camus:
"los
hombres siguen muriendo y no son felices"
¿Qué nos pasa? ¿Por qué somos tan
conservadores y no votamos por "el cambio"?
¿Quién
de nosotros no va a querer un mundo nuevo y mejor?
Debemos de llegar a un cambio, con prudencia y con búsqueda de aliados. Las
revoluciones de hoy no tienen que ser sangrientas, ni con pérdida de la libertad
de algunos conciudadanos, hemos de aplicar el ingenio y la sabiduría de
Maquiavelo.
Notas:
1ª
Bután, es un país del sur de Asia ubicado en la cordillera del Himalaya y sin
salida al mar. Limita al norte con la República Popular China y al sur con la
India.
2ª
La ciudad mencionada por Pau Casals, Toluges en catalán, es Toulouges en
francés, situada en la región Languedoc-Rosellón. En esta ciudad en el año 1027
bajo la presidencia del abad Oliba, se celebró la primera asamblea de Paz y
Tregua de Dios de los condes catalanes. La Paz y Tregua de Dios fue un
movimiento social impulsado en el siglo XI como respuesta de la iglesia y de
los campesinos a los abusos perpetrados por los nobles feudales. Se puede considerar
el origen de las Cortes Catalanas.
