Recuerdo,
que la primera vez que oí hablar de democracia fue en la época de Franco por medio
de un entrañable profesor, que desgranó la palabra en sus dos vocablos griegos
DEMOS Y KRÁTOS, y su traducción por
PUEBLO Y GOBIERNO, y acabó diciendo que su significado era EL GOBIERNO DEL
PUEBLO.
Desde
entonces han pasado muchos años, y he vivido la dictadura y he llegado hasta la
actual democracia que hemos elaborado
hasta la fecha. Lo que no nos explicó mi entrañable profesor era que hay varios niveles de democracia.
Lo
que está claro, que la que tenemos es de un nivel muy bajo, entre otros
defectos, al no permitir que la
Generalitat de Catalunya que pueda consultar la opinión del pueblo catalán en
cuanto a su futuro.
Afortunadamente
el pueblo que es soberano, se organiza, y con su empuje hacia arriba, hacia sus
gobernantes, mejorará el bajo nivel
democrático actual, indicando a los políticos
que sólo son meros representantes del pueblo y están a su servicio. Esto
lo estamos viviendo con el pulso de Mas, arropado por la voluntad de los catalanes, y Rajoy con su inmovilismo, y lo
que nos va acontecer con la fuerza emergente de PODEMOS en todo el territorio
Español.
En
la empresa, como en la política, se utilizan “tácticas de guerra” y Artur Mas
es un experto combatiente, que utiliza las tácticas de la INICIATIVA Y LA DE PONER UNA BALA EN LA RECÁMARA. La
primera táctica es llegar el primero
en los reiterados campos de batalla y
esperar al enemigo descansando. Esto es una ventaja, porque el enemigo Rajoy llega tarde, cansado y
cuando llega tiene que luchar.
La
otra táctica, la de “poner una bala en la recámara”, quiere decir, tener
siempre un plan alternativo a toda
decisión tomada, con la expectativa de si falla. Yo que soy un romántico, la
táctica de “poner una la bala en la recámara” la llamo la TACTICA DE GUILLERMO
TELL. Para reforzar mi exposición no tengo otro remedio que recordaros la LEYENDA DE GUILLERMO TELL:
“Ocurrió en el año 1276, en el Cantón de Uri de
Suiza, donde un hombre llamado Guillermo Tell inició la rebelión del pueblo
suizo para su independencia contra el gobernador imperial.
El gobernador decidió castigar a Guillermo Tell, obligándole a
disparar a una manzana colocada sobre la cabeza de su hijo. Si acertaba en el
blanco le concedía la libertad, pero si fallaba sería arrestado.
Tell disparó y acertó a la manzana.
Sus amigos le felicitaron y le preguntaros por qué
había preparado dos flechas si sólo podía tirar una, a lo que Tell respondió: si
hubiera fallado con la primera habría disparado la segunda contra el
gobernador”.
El resultado de este movimiento hacia arriba del pueblo catalán del 9-N,
no lo voy a comentar porque es obvio su resultado es positivo, ahora sólo nos
resta esperar la dirección de la segunda flecha que ha guardado nuestro GUILLERMO TELL
CATALAN.
Notas:
(1) Dedico
este post a todos los jóvenes que
quieren una democracia de alto nivel para España, y en especial para todos
aquellos, que empleen en sus respectivas
empresas estas dos simples tácticas que he mencionado.
(2) Qué
lástima que en vez de querernos españolizar en el transcurso de estas últimas
décadas, nosotros los catalanes no hayamos sabido catalanizar al resto de los
españoles.
(3) La
fecha del 9-N se escogió en conmemoración de la caída del muro de Berlín en
1989, y el muro que nos separa de España, éste, también caerá.
Y lo más fuerte es que el resto de España nos tildan de antidemocráticos. Es antidemocrático permitir que se exprese la opinión de un pueblo?. Creo que el 9N fue una demostración de que somos una nación que nos organizamos y movilizamos con un civismo y madurez exquisita, y con una alegria y ilusión que yo personalmente nunca había vivido hasta ahora. Como bien tu dices hay muchos niveles de democracia y en España estamos años luz de un estado realmente democrático.
ResponderEliminarTu hija Marta