A Ignacia, a Vicente, a Isabel y a Francisco
En España hay costumbre desde
hace más de un siglo, que cuando suenan las campanadas de las doce de la noche,
en el día de hoy, al ritmo de las mismas nos comamos un grano de uva, que
representan los deseos o propósitos que
queremos cumplir en el año que comienza. Pero la mayoría de la gente en vez
de deseos o propósitos, creen que comerse la 12 uvas durante las doce
campanadas, es una garantía de suerte para
el año el año próximo.
Mi experiencia personal, es que
nunca me he podido comer las 12 uvas a tiempo, como si mi organismo me dijera
que 12 deseos y propósitos para el año próximo son demasiados. Por otro lado, la suerte, no ha sido causa de preocupación
por mi parte, ya que me siento afortunado.
A continuación, brindamos con los
seres queridos que nos rodean en la noche vieja, con cava en Catalunya y champán
en el resto de la península. En Catalunya, hay un brindis muy generalizado que
decimos:
“Salut i força al canut”
En contra de lo que muchos
entienden, sobre todo el sexo masculino,
es que estamos deseando salud y potencia sexual (força al canut), la verdad
es que la palabra “canut” no se refiere a la virilidad del hombre, sino a un
cuerno que en la Edad Media se guardaba la pólvora, y más tarde los
comerciantes guardaban el dinero. Además “força”, tiene también la connotación
de “molt” (mucho), es decir, que se refiere:
“Salud y mucho en el cuerno” (para simplificar, salud y dinero)
Creo que este brindis resume todo
un deseo de felicidad para el prójimo, ya que por una parte le deseamos “la
completa ausencia de pesares, mortificaciones o dolores físicos, y por la
otra, le deseamos dinero para satisfacer
sus necesidades básicas y algunos caprichos”.
La diosa Fortuna portadora de una cornucopia
La palabra “cornucopia”, viene del latín “cornu”, cuerno, y “copia”,
abundancia, por lo tanto nos
referiremos al “cuerno de la abundancia”, que es un símbolo de riqueza y de buena
suerte, que lo soporta la diosa Fortuna.
Este cuerno procede según la
mitología de la cabra Amaltea, que amamantó al niño Zeus, y éste jugando, y sin
mala intención, se lo rompió.
Además, a la diosa Fortuna se le
representa con los ojos vendados, y de pie encima de una esfera alada,
simbolizando de esta manera que la fortuna es ciega y que llega y se marcha
volando.
La diosa Ocasión
La diosa Fortuna se la relaciona con la diosa Ocasión, también llamada diosa Oportunidad. Se la representa
con una larga cabellera por delante y calva por detrás de aquí del dicho
popular:
“la Ocasión la pintan calva”
La
diosa sostiene un cuchillo con su mano derecha,
para cortar nuestras ataduras y podamos aprovechar la ocasión o la
oportunidad, que nos brinda la diosa Fortuna cuando nos ofrece la suerte, pero
las alas de sus talones inducen que pasa por nosotros con rapidez, y no se le
puede asir por los pelos de la nuca, una vez que nos ha rebasado,
porque tal como he dicho está calva de esta zona.
Esta diosa desconocida, por la mayoría de los
mortales, es muy importante en nuestras
vidas, y os quiero dar una advertencia queridos amigos para el próximo año, porque la suerte nos pasará
por nuestro lado, y la tendremos que
detectar, y además, tomar en aquel
instante una decisión acertada, de lo contrario, como pasa la mayoría de las
veces en el transcurso de nuestras vidas dejaremos pasar de largo a la “Ocasión”.
Pedro Calderón de la Barca
(1600-1681), el gran poeta y dramaturgo del Siglo de Oro español, autor de la obra
teatral La vida es sueño,
advirtió con una hermosa frase poética la gravedad de la situación de desperdiciar o no saber aprovechar la
oportunidad:
“Dichas que se pierden son desdichas más
grandes”
También lo sabios romanos valoraban la importancia de aprovechar
la oportunidad, acuñaron por medio de Horacio, el gran poeta latino, la frase, “Carpe diem”, que literalmente significa “aprovecha el día” y extensivamente se
entiende como, “aprovecha el momento, no
lo malgastes”.
El brindis por mis antepasados
Cuando, esta noche alce mi copa de cava en el brindis por el
nuevo año, agradeceré la SUERTE QUE TUVE CON MI PRIMERA FAMILIA, mis padres,
abuelos y hermanos, y como homenaje a mis antepasados, y en representación
de todos ellos, esta noche brindaré por mis
abuelos: a Ignacia, que colaboraba en
nuestros juegos de “indios y cowboys”, a
Vicente que componía versos para
recitarlos en la Navidad, y nos llevaba
cada año a primeros de noviembre a ver a
Don Juan Tenorio, a Isabel, que vivía en
el mismo rellano de la escalera de nuestro piso, y nos pasaba platos con
torrijas y arroz con leche, con olor y
gusto a la canela en polvo y en rama, a Francisco, que me puso
a mi entera disposición, desde
que supe leer, su maravillosa biblioteca, con las
colecciones completas de los míticos,
Julio Verne, Marc Twain, Karl May, Alejandro Dumas, Sir Walter ScotT, Daniel
Defoe, Jonathan Suift, Chesterton, Dickens etcétera, y sobre todo EL QUIJOTE, y con
el Quijote descubrí a la diosa Fortuna, y la enseñanza “de que cada uno es el
artífice de su vida”.
Notas:
1ª
Transcribo el pasaje de la diosa Fortuna, del segundo tomo, capítulo LXVI:
.... Sancho, dijo:
Tan
de valientes corazones es, señor mío, tener sufrimiento en las desgracias como
alegría en las prosperidades, y esto lo
juzgo por mí mismo, que si cuando era gobernador estaba alegre, agora que soy
escudero de a pie no estoy triste; porque he oído decir que esta que llaman por
ahí Fortuna es una mujer borracha y antojadiza, y sobre todo ciega, y, así, no
ve lo que hace, ni sabe a quién derriba ni a quién ensalza.
Muy
filósofo estás, Sancho —respondió don
Quijote—, muy a lo discreto hablas; no sé quién te lo enseña. Lo que te sé
decir es que no hay fortuna en el mundo, ni las cosas que en él suceden, buenas
o malas que sean, vienen acaso, sino por particular providencia de los cielos, y de aquí viene lo que suele decirse: que
cada uno es artífice de su ventura.
2ª
Reivindico una vez más el color amarillo, y como no, con el oro amarillo del
cava catalán.
3ª
Os quiero FELICITAR EL NUEVO AÑO, con la
entrañable felicitación que recibo cada año de mi amigo de la infancia, que conoció a mis padres y a mis abuelos
maternos, Josep Martí Capell, que en su
día fue un afamado ilustrador de comics, y que a
pesar de sus años, sigue con sus habilidades
en la ilustración y con una magnifica
imaginación.
(El acrónimo HDL (Hig
Density Lipoprotein), son las lipoproteínas de alta densidad, conocidas como el
"colesterol bueno")
Y además, quiero daros las GRACIAS POR VUESTRA PACIENCIA POR LEERME
durante estos 5 años, a pesar de mis deficiencias literarias, pero
con todo, ya he rebasado las 19.000
entradas, y lo curioso del caso, es que en este último año, vuestras visitas se han triplicado.